López Manrique
Tercera etapa para la atleta de Peguerinos Mónica Aguilera Viladomiu en la vigésimo quinta edición de la Marathon des Sables, y tercera victoria de esta deportista que se afianza en la primera posición de la clasificación femenina tras la retirada de la ganadora del pasado año y hasta ahora su principal rival, la marroquí Touda Didi, que abandonó en el kilómetro 12,8, justamente en el primer control de paso, debido a padecer dolores abdominales y deshidratación, cuando ya contaba con diez minutos de retraso.
La ventaja de Mónica sobre la segunda clasificada supera ya la media hora
|
La jornada llevó a los 986 atletas supervivientes desde Jebel El Oftal hasta Taourirt Mouchanne por un recorrido de 40 kilómetros relativamente llanos y con temperaturas que oscilaron entre los 26º C a la salida y los 33º C de la línea de meta al mediodía, cuando entraron los primeros clasificados.
Mónica Aguilera no tuvo problemas para superar la etapa, empleando 4 horas, 18 minutos y 47 segundos, aumentando la ventaja en la general en relación con su perseguidora, la holandesa Jolanda Linschooten, que se encuentra a 32 minutos y 32 segundos. El tercer lugar lo ocupa ahora la británica Jennifer Salter, a 1 hora, 25 minutos y 4 segundos. En el caso del otro atleta de Peguerinos, Aurelio Oliván, se mantiene en la duodécima plaza de la clasificación general, la misma que ocupó al concluir la tercera etapa, pugnando por subir hasta la octava posición. El líder masculino es el marroquí Mohamad Ahansal, con el burgalés Jorge Aubeso en tercer lugar.
“Está siendo un Sables especialmente duro, con un calor inmenso y llanuras interminables”
|
Oliván advierte desde Marruecos tener “muy malas sensaciones” después de la etapa, “perdiendo tiempo respecto a los primeros. Ayer me encontré muy bien, hoy regular, aun así luchando con muchos problemas físicos para entrar entre los diez primeros”. Acerca de la misma dice que era “casi completamente plana”, con “mucha gente retirada”. “Está siendo un Sables especialmente duro”, prosigue. “Estamos muertos”, con un “calor inmenso, llanuras interminables de varios kilómetros” y “mil grados a la sombra”. “Mónica está agotada pero ha vuelto a ganar la etapa. La marroquí salió muy fuerte y cuando ‘Moni’ la pasó, a los pocos kilómetros se ha retirado. Mónica ha seguido a su ritmo pero aun así se hace durísimo. Otra etapa ganada, estamos muy, muy contentos pero con los pies en el suelo porque de hecho sólo llevamos 105 kilómetros sobre los 250”, concluye.
Hoy se disputa la etapa reina del maratón sahariano, entre Taourtrit Mouchane y Oued El Idaid. Un ultrafondo de 82,2 kilómetros que servirá para asentar la clasificación general. La longitud del recorrido obligará a muchos atletas a realizar la etapa en dos jornadas, por lo que no tendrán más remedio que pernoctar en el camino. La máxima válida para estos casos es ‘Inc´h Alá’ (Si Dios quiere). Sobre esta etapa Aurelio Oliván señala que “necesitamos mucha cabeza y tranquilidad porque queda mucho, pero las perspectivas son buenas”.
|