Importante y contundente victoria del Óbila Club de Basket frente al Rayet Guadalajara en un partido en el que el equipo abulense comenzó perdiendo pero su tono fue subiendo conforme avanzaban los minutos. Segundo triunfo de la temporada para los verderones, los dos en casa y tercero en poco más de un mes sobre el equipo entrenado por Javier Muñoz, a quien tiene bien cogida la medida el técnico local Antonio Cano.

El choque comenzó bastante igualado, siendo Paul Willians el mejor jugador local, anotando puntos y anulando a sus rivales en la pintura como Zach Andrews y Manu Ruiz. Una actuación que continuaría todo el partido hasta el punto de que el americano fue el máximo encestador y el más valorado. Con empate a ocho en el electrónico, el visitante Diego Pérez encestó cinco puntos seguidos y ponía alas a su equipo, que obligaba al técnico local a pedir un tiempo muerto. El Óbila no reaccionaba pese a ello y el cuadro alcarreño mantenía su ventaja e incluso la incrementaba con un triple de Roberto Núñez hasta 13-20. Fue una de las pocas ocasiones en que se pudo ver al escolta que persigue a Dreke Bouldin en el ranking de puntos de la LEB Bronce. Al final del cuarto se llegaba con un 17-22 para el Rayet, con una canasta de Sergio Sánchez a falta de dos segundos.

Si mal acabó el primer período para el equipo abulense, mal comenzaba el segundo debido a que Rakim Hollis conseguía un triple que situaba al cuadro de Guadalajara ocho puntos por encima (17-25). Inmediatamente llegaba la reacción local con una canasta de Ion Ugarabe y un triple de Víctor Chuan, cuyo maltrecho tobillo le impedía realizar su mejor juego. En el ecuador del cuarto, el Óbila se fue acercando a su rival, de modo que tiro de dos de Elizagaray ponía por delante al conjunto verderón, que tenía a continuación cuatro puntos de ventaja debido a un triple de Bouldin (33-29). Un lanzamiento de 6,25 contrarrestado por otro de Núñez y otro triple de Anton Savitski igualaba la contienda a 36. Acelerón de nuevo del Óbila, con un parcial de 8-0, mitigado por el rival con un triple de Javi López y una canasta de Savistki, de modo que al descanso el marcador señalaba 44-41.

Con muchas fuerzas saltó a la pista el Rayet Guadalajara al inicio del tercer cuarto, colocando un 0-7 al equipo anfitrión, con triple de Hollis y tiros de dos de Andrews y Sergio Fernández. Réplica local por medio de dos canastas de Bouldin y un nuevo empate, esta vez a 48. El encuentro se hizo entonces más intenso con alternativas en el marcador. A falta de minuto y medio para el término del cuarto señalaba un 63-62 para el Óbila. Un tiro libre de Ion Ugarabe y dos canastas de Sergio Sánchez facilitaban la ventaja local en el electrónico al final del tercer cuarto, con el resultado 68-62.

Y llegó el período definitivo, de claro color verderón. El Rayet Guadalajara se diluyó como un azucarillo en agua frente a un rival que se mostraba física y tácticamente superior, con un espectacular Bouldin anotando diez puntos en este período fruto de un tiro de dos, dos triples y uno de los mates marca de la casa, que dejaba doblado el aro de la canasta.

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