Finalizado el año 2005, cuando aún no se ha entrado en la segunda vuelta del grupo A de la Liga EBA de baloncesto, el representante abulense en esta competición, Carrefour El Bulevar de Ávila, sigue ocupando la primera posición a la que se alzó hace muchas semanas, sin que hasta ahora nadie le haya desbancado. Es la mejor situación deportiva obtenida por un club que nació hace tan solo cuatro años.
Nadie esperaba a principio de temporada que los abulenses ocupasen tan privilegiado lugar que da derecho a jugar los play off de ascenso a LEB. Sin embargo, el objetivo es mantenerse al final de campaña en la zona media de la clasificación, siendo la sexta plaza la meta deportiva a alcanzar, lejos de los últimos cinco puestos que condenan al descenso de categoría. De trece partidos jugados, Carrefour únicamente ha salido derrotado en tres. El primero fue en casa, en la jornada inaugural, cuando pagó el pato de la falta de acoplamiento de principios de temporada, siendo superado por los gallegos de Inelga Cefrico, que a la postre son su más inmediato rival en la persecución del liderato. La segunda derrota no vino hasta la jornada novena, cuando perdieron en Santurtzi, en un partido en el que nunca estuvieron metidos. La tercera y última vino la última jornada jugada, siendo los cántabros de Leche Altamira Piélagos –terceros clasificados- quienes hicieran doblar la rodilla a Carrefour.
En la trayectoria de los tres meses de competición habidos hasta ahora, las lesiones han impedido disponer de la plantilla al completo que permitiera mayores rotaciones para el descanso de los más habituales. Carlos Mosquera fue el primero en caer, después lo hizo Borja Aldea y el último lesionado ha sido Javier García Panizo. Los tres están en fase de recuperación y serán los “fichajes de invierno” del Carrefour El Bulevar, una vez que se recuperen de sus dolencias.
A pesar de haberse producido en plena temporada el cambio de entrenador –la directiva cesó a Gustavo Nieto, sustituyéndole por Antonio José Gómez-, esta circunstancia no ha afectado a los resultados deportivos, lo que demuestra el enorme potencial de la plantilla de esta temporada y la estabilidad del club, por encima de las personas. La nueva dirección técnica ha sabido coger el timón del banquillo con serenidad, sabiendo perfectamente que es lo que debía hacer en cada momento. Se ha dado mayor protagonismo a los jugadores de Ávila, unas veces por necesidad y otras para que cogiesen minutos de experiencia, con resultados satisfactorios y el agradecimiento de los aficionados que en cada partido pueblan en mayor número las gradas del pabellón de San Antonio.

Inexpugnables en el juego interior
La llegada de Nick Maglisceau, un jugador internacional canadiense con experiencia LEB, ha dado un plus al conjunto abulense. El pívot de pasaporte holandés forma un tandem inexpugnable en los aros con Fran Ruiz, teniendo el mejor juego interior del grupo, donde Maglisceau encabeza la clasificación de máximo reboteador y mateador. Si a ello se suma la aportación anotadora de Goyo Domínguez, indudablemente las cualidades de este Carrefour han mejorado respecto al de la temporada anterior, de la que siguen David Mediano y Carlos Mosquera, como jugadores más destacados, configurando un cinco de gran calidad. Como sexto hombre hay que señalar al argentino Mariano Barifuzza, joven escolta de buena planta y que todavía tiene que explotar para dar lo mejor de sí mismo. El séptimo de caballería sería el bilbaíno Javier García Panizo, fuerte ala-pívot que si bien no es de un juego espectacular para el aficionado, sí ha demostrado una gran efectividad para el trabajo de conjunto. Las cuatro plazas restantes del plantel, las ocupan otros tantos jugadores abulenses: Javi Pollos, hombre con varias temporadas ya en el equipo; Borja Aldea, que retorna al Óbila después de su transición por la Universidad de Valladolid, aportando este año más experiencia; Rubén López, el ídolo de la afición, que en los minutos que le ha dado Antonio José Gomez, ha cumplido con la labor encomendada por el entrenador; y por úlitmo, Alberto Jiménez, el primer fruto de la cantera del novel club abulense que llega al equipo EBA. Por el momento, la plantilla y el cuerpo técnico disfrutan de las vacaciones navideñas, que tendrán que finalizar para volver a las canchas en el ya tradicional torneo navideño que se jugará el día de Reyes frente al Real Madrid Veteranos. Después, sin apenas descanso, vuelta a la competición liguera para recibir el día 8 de enero al C.B. Galicia, sucesor del extinto OAR Ferrol que militase con éxito en la ACB, actualmente sexto clasificado con ocho victorias y cinco derrotas.
Capítulo aparte merece la cada vez más extensa cantera del Óbila Club de Basket, que en pocos años han pasado de ser de los últimos en las competición autonómicas para codearse ya esta temporada con los equipos punteros de sus categorías, como lo demuestra el hecho de haberse clasificado para la segunda fase los dos equipos cadetes masculino y un equipo infantil masculino. Además, hay que resaltar la labor que se viene haciendo con los más pequeños a través del Club Mini, que este año extiende sus brazos a la provincia, concretamente a la localidad de Las Navas del Marqués.

La consolidación del proyecto del Óbila se plasma en la reciente constitución de la Fundación del mismo nombre, que ha recibido del ayuntamiento la cesión de un terreno adosado al pabellón municipal de San Antonio, donde estará la sede de la misma.