Está claro que la gestión del Caja de Ávila CSC y/o la del Ávila Voley no ha sido la más adecuada. A lo que he visto y he oído en un año me refiero. "A Amador le han vendido la moto". Eso me lo han dicho en más de una ocasión. Parece ser que cuando se creó el nuevo club se le prometió una serie de cosas que no han acabado de llegar. ¿Quién y qué le prometieron? Rajó el Presi tras la suspensión del Torneo de Navidad, pero no terminó de decir nada, ¿por qué? Porque pensaba equivocadamente, y sólo hay que ver lo que está pasando, que la situación podría reconducirse. Yo no sé que promesas le hicieron al bueno de Amador, pero han terminado por no llegar de nuevo. Amador, no te puedes fiar tanto de la gente, y a mi experiencia me remito. Con un plan "A" que no depende su llevada a cabo de solo tus recursos no se puede avanzar. Hay que tener tres, cuatro, cinco o veinticinco planes alternativos.

Volvamos a especular en quién puede haber prometido ayuda al club y no se la ha dado. Todos apuntamos a las Instituciones y sobre todo a las más cercanas. Que el Ayuntamiento sufrague la subsistencia de un club privado no es la solución, pero pensemos en la cantidad de actos culturales y turísticos programados en la Ciudad para atraer visitantes. El Caja de ÁVILA CSC y luego el ÁVILA Voley han llevado con su nombre las murallas por España y parte del extranjero. Los del Mercado Chico deberían apoyar de un modo incondicional en estos momentos al club existente con una financiación directa. Y más adelante recuperarla, incluso cesándola, encauzando la inversión de capital privado en el club. Ávila está creciendo, hay muchas constructoras edificando. Se podría intentar que invirtiesen dinero en el Club, por ejemplo. Pero esto no solo compete al Ayuntamiento; los del Torreón de los Guzmanes también deberían decir algo ya que Provincia y Capital comparten nombre. Para hacer algo sólo hay que querer hacerlo. Yo no sé si los organismos dirigidos por Miguel Ángel y Agustín quieren, aunque deberían querer para que el nombre de Ávila siga paseando en competiciones de primer nivel. Si no se actúa ahora el Ávila Voley, espejo de lo que quieren llegar a ser deportivamente otros equipos abulenses, morirá. Sólo las mentes arcaicas que no han salido de las murallas, pueden sentirse indolentes ante la desaparición del deporte que más repercusión ha dado a la Provincia junto con sus ciclistas.