La tercera prueba del certamen europeo de las Le Mans Series supuso el estreno en los puntos del equipo Epsilon Euskadi del que forma parte el piloto abulense Miguel Ángel de Castro junto con Ángel Burgueño. Al finalizar la carrera de los 1.000 kilómetros en el circuito belga de Spa-Francochamps, el vehículo conducido por ambos ocupaba la undécima posición –séptimo en LMP1-, que les aportaba dos puntos tanto para la clasificación de equipos como para la de pilotos.

Tras salir en decimocuarto puesto de la parrilla, De Castro y Burgueño después de la primera hora se situaba en la decimoquinta posición, siendo décimos en la categoría LMP1. Hasta el decimotercer puesto ascendieron en la segunda hora, novenos de su categoría. Un lugar más subirían tras la tercera hora, que les serviría para la octava plaza de LMP1. Después de la cuarta hora, el Epsilon Euskadi caería hasta la decimoquinta posición, novena de su categoría. Un par de puestos recuperaron en la quinta hora, ocupando la octava plaza de LMP1,  para finalizar la carrera en undécimo lugar, los séptimos de su categoría, sumando así los dos primeros puntos del campeonato, que colocan al equipo como undécimo en la general de LMP1, con Miguel Ángel de Castro y Ángel Burgueño, decimoquintos en la clasificación por pilotos.

El equipo formado por Marc Gené, Nicolas Minassian y Jacques Villeneuve, se alzaron con la victoria en Spa-Francochamps, a los mandos de un Peugeot 908 HDi FAP.