Un total de 20 mujeres participaron en el 8º Raid Femenino de Toyota, que con la colaboración de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) se prolongó durante cinco intensas etapas, comenzando en Sevilla y terminando en San Sebastián, con el paso por la provincia de Ávila en dos etapas. Las participantes han conducido por rutas todoterreno, teniendo que trabajar en equipo a la hora de enfrentarse a diferentes habilidades de conducción con rutómetro, con GPS, vadeos o trialeras.
Durante más de 1.500 kilómetros, la caravana de 10 Toyota Rav-4 ha circulado con el lema ‘Mucho X Vivir’, como mensaje de esperanza a favor de la lucha contra el cáncer de mama, una enfermedad que afecta a más de 10.000 personas en España. Así, etapa tras etapa, las conductoras aventureras y las voluntarias de la AECC de las localidades por donde ha transcurrido el Raid han colaborado juntas difundiendo información sobre la detección y diagnóstico precoz de este tipo de cáncer.
El Raid también se ha complementado con actividades medioambientales y culturales en cada una de las tres paradas diarias de cada etapa, además de las recepciones oficiales de los representantes municipales de cada localidad, quienes han apoyado el proyecto solidario emprendido entre Toyota y la AECC.
El tránsito por territorio abulense del Raid Femenino Toyota comenzó en la segunda etapa, entre Almadén y Barco de Ávila, atravesando la Sierra de Gredos. La localidad barcense fue el lugar de pernoctación e inicio de la tercera etapa en dirección Ávila-Valladolid-Palencia. El banderazo de salida en Barco de Ávila se complementó con la limpieza de las orillas del río Tormes, bajo el castillo.
Para la responsable de prensa de Toyota, Rebeca Guillén, “el recorrido ofreció un sinfín de paisajes diferentes, la grandiosa belleza del macizo de Gredos, los atractivos pueblos del Valle del Corneja, así como de la Sierra de Ávila”. De la segunda etapa, Almadén-Barco de Ávila, comenta que “fue un magnifico colofón de jornada terminar en Barco de Ávila, donde estaba prevista la cena, a la que asistieron Agustín González, alcalde de Barco, y Sonsoles García, teniente de alcalde. Al terminar, las chicas efectuaron su primera acampada sobre la hierba de las piscinas municipales”.
De la tercera jornada entre Barco de Ávila y Ávila, Guillén informa que “resultó larga e intensa. Las participantes empezaron con una acción medioambiental, ayudando a los integrantes de protección civil a limpiar las orillas del Tormes, junto al bello puente medieval, siguieron con un rápida visita al imponente castillo de Valdecorneja, y después recorrieron el casco histórico de la ciudad para acceder a la Plaza Mayor, donde esperaba Sonsoles García, teniente de alcalde, para despedir al grupo con el banderazo de salida”.
“El recorrido de mañana atravesó el Valle de Corneja, se asomó a la medieval Bonilla de la Sierra, y contempló los picos de la Sierra de la Paramera mientras buscaba la Sierra de Ávila. A mediodía el grupo se congregó junto a los Cuatro Postes de la ciudad de Ávila, desde donde las chicas pudieron admirar el magnífico recinto amurallado de la villa. Escoltadas por la policía, las integrantes del 8º Raid Femenino llegaron a las murallas, aparcaron y se encaminaron al Ayuntamiento de la ciudad, donde esperaban Áureo Martín Labajos, teniente alcalde, Patricia Rodríguez Calleja, concejala de Deportes, y Marisa Villegas, coordinadora de la junta provincial de la AECC, para recibir a las chicas y dar la bienvenida. Tras la recepción, en la misma plaza del Mercado Chico, tuvo lugar la comida”, continúa relatando Rebeca Guillén, antes de que el Raid atravesase tierras abulenses en la jornada de tarde, antes de pasar a Segovia y Valladolid.
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