La tercera etapa del Tour de Francia fue una fiesta para los franceses, con el triunfo de Samuel Dumoulin, del Cofidis, y el liderato de Romain Feilu, del Agritubel, en una jornada accidentada en la que el español Alejandro Valverde perdió el maillot amarillo la víspera de la contrarreloj de Cholet, que empezará a marcar diferencias.

Una escapada de cuatro ciclistas abarcó los 208 kilómetros que unían Saint Malo y Nantes, un trayecto marcado por la lluvia y el viento que no terminó en sprint como se esperaba y donde una caída a 25 kilómetros de meta le costó la retirada al español Ángel ‘Litu’ Gómez (Saunier Duval), fracturando el pelotón y algunos favoritos quedaron cortados como Riccardo Riccó y Denis Menchov, que llegaron a la meta a 38 segundos del grupo de los hombres importantes, que arrribó a 2’03” del ganador. Entre ellos se encontraba el abulense Carlos Sastre –atento al momento del corte del pelotón- ocupando la plaza 70º, que le sitúa en trigésimo primera posición en la general, donde se encuentra a 1’52” del líder.

La cuarta etapa representa la primera cita importante para los favoritos, ya que se medirán sus fuerzas en una contrarreloj de 29,5 kilómetros con salida y llegada en Cholet, un recorrido con muchos toboganes que no deben impedir un triunfo de un especialista.

El comentario de Carlos Sastre desde Nantes:

“La etapa de hoy ha resultado como estaba previsto a priori. Era una etapa en la que se esperaba que iba a hacer muchísimo viento, en la mayor parte del tiempo de costado, provocando que la parte final diera más de costado y a favor, lo que ha provocado que la parte final se haya cubierto con muchísimo nerviosismo y bajo mucha tensión. Como hemos visto, ha habido corredores importantes para la general que han perdido unos segundos importantes.

A nivel personal, el estar rodeado de un equipo con gente como Cancellara, O’Grady, Arvesen, Voigt o los hermanos Schleck, o cualquiera de los compañeros que tengo en esta carrera, te da una tranquilidad y una calma impresionante. Por lo tanto, ha sido una etapa de mucho desgaste para todos los equipos, que la he salvado bastante bien.

Hemos avanzado un día más en este Tour de Francia en el que las sensaciones no son malas y mañana, con la primera contrarreloj, tenemos el primer test importante para todos los que pensamos en la clasificación general de esta carrera.”