A consecuencia de ello, cuando se habían recorrido poco menos de tres kilómetros de carrera, los ciclistas decidieron no continuar. Ocho abulenses participaban en el campeonato nacional, Francisco Mancebo, Carlos Sastre, David Navas, Nacor Burgos, Ángel Vallejo, Pablo Lastras, David Martín Peribáñez y Javier Sáez.

La Real Federación Española de Ciclismo ha anunciado el estudio de posibles acciones legales “por los perjuicios ocasionados ante las filtraciones”. El presidente de la Asociación Española de Ciclistas Profesionales, José Rodríguez, ha dicho que el reportaje del periódico ensucia la reputación de todos sus miembros. “Nuevamente nuestro colectivo se ve sacudido con acusaciones generalizadas poniendo bajo sospecha de dopaje a todo el pelotón. Los ciclistas profesionales apoyamos la lucha contra el dopaje”, dijo Rodríguez en rueda de prensa.

"En momentos tan difíciles como estos queremos demandar la ayuda de las instituciones públicas, sobre todo del Consejo Superior de Deportes, y privadas que componen el medio ciclista e ir todos en la misma dirección para poner todos los medios que permitan recobrar la normalidad que nunca se debió perder", añadió la Asociación de Ciclistas Profesionales. "Queremos pedir la comprensión del público, patrocinadores e instituciones y pedirles también que no pierdan la confianza en nuestro deporte ni en nuestro trabajo", concluye el comunicado.

El Relax-Gam no está de acuerdo con la aptitud de los corredores

La protesta del pelotón profesional ha provocado la reacción del equipo Relax-Gam, en el que militan los abulenses Burgos y Vallejo, que ha expresado su disconformidad con la postura adoptada por los corredores. El grupo de Fuenlabrada cree que “no es justo tomar estas medidas a última hora, sin recapacitar el daño producido a todas las casas comerciales. El Campeonato de España”, añade, “es la prueba más significativa del calendario español”.

El comunicado del Relax señala que “las personas implicadas deben de asumir su responsabilidad... y salir a la luz pública. Si los corredores quieren demostrar su malestar hacia los medios de comunicación por el trato dado, deberían de seguir las vías menos perjudiciales para el ciclismo”.