El Óbila se ha convertido en equipo de Final A4 al superar en el último partido con mucho sufrimiento al Fundación Adepal Alcázar por 66-60 en un encuentro que tuvo de todo, con rachas tremendas de ambos conjuntos y tensión, mucha tensión, por lo que había en juego. Fueron los abulenses, jaleados por una increíble afición, los que primero acusaron el peso de la responsabilidad, y de ahí que firmaran una primera parte bastante mala, mientras que los castellano-manchegos, mejor plantados y de la mano de un Rafa Monclova muy centrado, lograron las primeras diferencias.

Todo cambió en la segunda parte: los locales se quitaron de encima todos los miedos, y sacaron a relucir todo su potencial. De ahí la fantástica remontada protagonizada, con un tremendo parcial de 29-5 en este cuarto. Un triple de Nacho Elizagaray les puso por delante y, a partir de ahí, todo estuvo ya hecho. La diferencia, que llegó a superar la decena de puntos, fue ya insalvable para los visitantes y de esta forma, el Óbila se convierte en semifinalista en la Adecco LEB Bronce.

El partido comenzó con un triple de Rafa Monclova, seguido de otro de Francisco Javier Martín. Con el acierto anotador de la Fundación Adepal y el escaso tino abulense, el equipo manchego se marchó hasta diez puntos arriba (4-14) cuando ni siquiera habían transcurrido cuatro minutos. No obstante, poco a poco, los verderones fueron reduciendo distancias hasta llegar al final del período con un 15-19 desfavorable.

De forma similar al primero se inició el segundo cuarto, siendo Martín el autor de un lanzamiento de 6,25. Sin apenas moverse el luminoso fueron transcurriendo los minutos con muchos desatinos en los tiros a canasta hasta llegar al descanso en un extraño marcador de 21-32, donde el Óbila únicamente convirtió seis puntos, dos de Víctor Chuan, dos de Paul Willians y dos de Lamont Boozer, con un Dreke Bouldin que no se estrenó en este período, bien marcado por Martin Klimes, y que en veinte minutos tan sólo había logrado dos puntos. El equipo anfitrión únicamente acreditaba en ese momento un triple en toda la primera mitad y le estaba siendo imposible abrirse camino ante la rocosa defensa visitante.

El tercer cuarto salvador

Como suele suceder en el equipo abulense, la reacción llegó en el tercer cuarto, donde Óbila asestó a su rival un parcial de 29-5 en diez minutos excepcionales. Federico Castelló perforó las redes con un triple y sucesivamente los de Antonio Cano se fueron acercando a su rival, con entre otras aportaciones, cinco puntos de Sergio Sánchez. Un lanzamiento de tres de Elizagaray ponía por primera vez al Óbila por delante en el electrónico. El alero madrileño junto con Willians conseguía ver la canasta del Adepal, contribuyendo a que el cuadro local adquiriera una ventaja de trece puntos (50-37) al final del tercer cuarto.

Las cosas las veía ahora de otro color la ‘marea verde’ que arropó en todo momento a los jugadores locales, que supieron mantener un colchón suficiente a lo largo del último período, si bien cuando restaban 49 segundos para el final, Adepal Alcázar se acercó peligrosamente a seis puntos (59-53) gracias a un triple de Quique Bárcenas. A falta de 29 segundos la distancia era aún menor (62-58) y la eliminatoria quedaba aún en el aire. Las faltas personales cometidas por el cuadro alcazareño las supo aprovechar bien Castelló, que no falló ninguno de los cuatro tiros que tuvo que lanzar, certificando la victoria, el pase de su equipo a la final A4 y el grito de la afición “sí, sí, sí, nos vamos a Madrid”.

En la otra eliminatoria pendiente, el Promobys Tíjola superó al Fundación Valdemoro Siglo XXI por 87-77 en un encuentro en el que dejaron clara su superioridad desde los primeros compases del mismo. Así, los cuatro equipos que se jugarán las dos plazas de ascenso en la final A4 de Fuenlabrada serán Óbila, Promobys Valle del Almanzora, Huelva Baloncesto y Molina.