-Julio Jiménez, Ángel Arroyo, José María Jiménez, Nacor Burgos, Pablo Lastras, David Navas, Carlos Sastre... ¿qué les dan a ustedes en Ávila que todos salen buenos ciclistas?

-Mucho hace la cantera que tenemos desde años y el trabajo de una persona como Víctor Sastre, que nos ha marcado las pautas, las líneas de trabajo y amasado un poco las ideas que hacen falta para montar en bicicleta.

-Mucho hablar de lo buenos que son en su tierra pero después coge y se va a correr a Dinamarca.

-Me dieron trabajo allí. En Ávila no hay equipo profesional y las otras formaciones españolas no terminaban de convencerme y tomé la decisión de irme a Dinamarca, de lo cual me alegro.

-¿Su antiguo Once, ahora Liberty, no le convencía?

-El Once de entonces o el Liberty de ahora creo que es un grandísimo equipo, pero mis ideales y la forma que yo tengo de pensar en el futuro no los compartía con ellos y es cuando tomé la decisión de cambiar de aires.

-Ha vivido en lugares tan diferentes como El Barraco, Madrid, Ávila capital, y ahora Copenhague.

-Sí, también lo conozco algo, aunque siempre que voy apenas tengo tiempo para visitas turísticas, pero parece una ciudad muy bonita. En Madrid dí mis primeras pedaladas porque mis padres vivieron allí; me hice como ciclista en El Barraco y me he formado como persona en Ávila, que es donde vivo desde que tengo niños.

-¿Hay afición al ciclismo en Dinamarca?

-Mucha. Son países con una gran cultura de la bicicleta. De hecho todos los medios de trasporte están adaptados para que la gente pueda viajar con su bicicleta y hay lugares específicos para aparcarlas. Son países muy llanos donde la gente se maneja bien en bici.

-Pero hace mucho frío.

-Sí, pero te abrigas y es como todo, que terminas acostumbrándote.

-¿Siguen allí el desarrollo y los resultados de las carreras profesionales?

-Mucho. Nuestro equipo es muy seguido y de hecho la televisión danesa el año 2003 decidió hacer una película que despertó mucha expectación porque fue un producto que buscaba la parte humana del ciclismo. Se preocuparon de las personas, de los problemas de las lesiones, de los familiares, de muchas cosas para explicar al resto del mundo nuestros problemas y nuestro ambiente.

-¿Con qué se quedaría de lo que ha visto o conocido en Dinamarca?

-Son gente muy seria, me quedo con su seriedad.

-Y a la hora de comer, qué prefiere, alubias del Barco, cocido madrileño, salmón noruego o yemas de Santa Teresa.

-Prefiero un buen plato de alubias y las yemas.

-¿Es eso lo que realmente da fuerzas a los ciclistas de Ávila?

-Comemos de todo, yo al menos no le hago ascos a nada, pero la verdad es que las alubias con estos días tan fríos entran muy bien.

-Precisamente hablando del tiempo, ¿donde entrena mejor, en Dinamarca o en Ávila?

-La mayor diferencia es que aquí hay un poquito más de luz y eso ayuda mucho a la hora de salir y regresar de día.

-Media vida sobre la bici y otra media de un lado para otro, ¿qué es peor, las carreras o los viajes?

-En los aviones y los aeropuertos es mucho tiempo el que pierdes pero también se gana, auque los aeropuertos yo creo que no los queremos nadie.

-Fíjese si tuviera que ir a las concentraciones en bicicleta.

-Pues gastaría la otra media vida en ir y venir, pero se puede hacer.

-¿Qué han hecho los ciclistas para ser la Cenicienta del deporte?

-Los corredores nada, pero hay quien ha utilizado el tema del dopaje como un negocio o una forma de hacerse publicidad. Lo más importante para solucionar un problema sería luchar contra él y hablar lo justito. Sobre todo cuando no se conoce en profundidad.

-Pero existir, el dopaje existe.

-Por supuesto. Cuando sigue habiendo positivos es porque hay gente que no asimila que este deporte es de sacrificio, de mucho sufrimiento y respeto a los demás. Cuando me subo a la bicicleta no lo hago pensando en que los demás tratan de engañarme, sino en que todos se sacrifican, entrenan y que consigue sus objetivos de una forma natural.

-¿Y cuando van a ser tratados como si fueran futbolistas, por ejemplo?

-No lo sé, a mi lo único que me gustaría es transmitir a la gente la ilusión con la que entreno y es lo que trato de infundir a todos los niños que me miran. He crecido con este deporte, vivo de él y me he formado un futuro gracias a él. Estoy muy agradecido y encantado de practicarlo.

-Corredores así deben ser los primeros en pedir que se sancione de verdad a todos los culpables.

-Para eso hay una organización como es la UCI, que es la que tiene que poner los medios para que todos los culpables sean sancionados y a todos aquellos que no juegan con las mismas cartas que los demás se les descubra de alguna manera. Los principios y las normas los tienen que poner ellos.

-¿Una forma no sería la de hablar, en vez de guardar silencio cuando les sancionan como ha hecho Heras?

-Desconozco lo que pueda haber pasado con Roberto, no vivo con él. Una cosa de este deporte es que cada uno anda por un sitio y nadie sabe lo que hace el otro. Si yo estuviera con él sabría lo que hace, pero no lo sé.

-Usted es cuñado de José María Jiménez, otro de los grandes paganos de este problema.

-No vamos a relacionar unas cosas con otras. Esta situación es un poco diferente y José María fue otra víctima de esta sociedad.

-Cambiando de tema, con la ruptura de las grandes vueltas ¿se ha acabado el UCI-ProTour?

-No, muchas de las carreras que organizan las vueltas siguen dentro de él, lo que pasa es que hay conflicto de intereses, pero si encuentran el camino que debemos buscar todos -el mejor en bien del ciclismo- en un futuro puede ser importante para todos.

-¿Y los problemas no responden a demasiados intereses ocultos?

-No lo sé, cuando llego a casa lo único que me preocupa es estar con mi mujer, mis hijos y mis dos perrillos, si tengo tiempo.

-¿Y porqué todos los ciclistas son tan niñeros?

-Tenemos ese espíritu de lucha e inconformismo de los niños. Me gustan desde siempre, paso mucho tiempo fuera de casa y también hay que ayudar un poquito.

-Es cierto, se pasan la vida lejos de casa, ¿hay algún lugar donde le gustaría vivir?

-En casa, en el Barraco o en Ávila, me da igual. Soy feliz por aquí.

-Y además de tener claro el sitio, ¿qué hará en el futuro?

-Tengo muchos proyectos en mente, soy creativo e imaginativo y me gustaría sentar con el ciclismo las bases que necesito para luego aplicarlas en lo que quiero, fuera del ciclismo.

-¿Pero no se puede saber en qué?

-Es algo secreto, parecido a lo de la NASA.

-De volver a nacer, ¿volvería a ser ciclista?

-Creo que sí, este deporte me ha enseñado muchas cosas, le debo mucho. La experiencia que he adquirido y las vivencias que he tenido me han engrandecido y todo o casi todo se lo debo al ciclismo.

-Qué le falta y le sobra a este deporte.

-Sobra esa gente que solo piensa en hacerse rico a costa de los demás y faltan las bases económicas del fútbol, por ejemplo. Y más solidaridad entre nosotros.

-Pero siendo futbolista, por ejemplo, lograría antes su proyecto de la NASA.

-No me preocupa, lo más importante en esta vida es valorar las cosas y solo lo hacemos cuando nos cuesta conseguirlas.

-Parece que cuando cuelgue la bici no va a seguir en el ciclismo.

-Me gusta mucho y ayudaré a los niños que quieren montar buscando los medios y también con mi experiencia y mi imagen, pero quiero estar con mi familia.

-Hace mucho tiempo que se habla del declive del ciclismo.

-Demasiado. Es un deporte que mueve masas, que gusta a la gente y que aunque se hagan cosas para aumentar el rendimiento si no entrenas y no te sacrificas a diario no consigues nada.

-Al margen del ciclismo en qué pasa su tiempo Carlos Sastre.

-¿Aparte de la familia?.. Me encanta la electrónica, la informática y todo lo relacionado con los coches.

-¿No le interesan otros deportes?

-El atletismo le he practicado mucho y la montaña me encanta. No descarto que en un futuro practique el montañismo a un nivel superior a lo que se puede hacer en El Barraco, donde ya me lo conozco muy bien.

- Bicicleta: Mi compañera y la herramiento de trabajo.

-La carrera preferida: La Lieja-Baston-Lieja.

-Once o CSC: CSC.

-Tourmalet: Dureza, belleza y emoción.

-La meta: El descanso.

-El Barraco: Mi vida.

-Un color: El amarillo.

-Una mujer: Piedad.

-Una comida: Solomillo con patatas fritas.

-Una bebida: El agua de Fuentedosa (Ávila).

-Avión: Transporte rápido, pero con respeto.

-Vampiros: Unos... bueno hacen su trabajo.

-Podio: Un sueño.

-Segundo o tercero en la Vuelta: Tercero, es lo que conseguí en la carretera.

-Un deseo para el 2006: No tener lesiones.

-¿Y un temor?: Respeto mucho, pero temor no.

-Una aspiración en la vida: Consiguiendo mis metas voy a ser mejor como padre y persona.

-Un amigo de los de verdad: Tengo cuatro muy bien guardados, pero no quiero despreciar a nadie.