Ángel Vallejo, ciclista abulense del Relax-Gam, que se encuentra en su tercera temporada como profesional, fue uno de los protagonistas de la tercera etapa de la Vuelta a España. Junto con Serafín Martínez Acevedo (Karpin Galicia) y David de la Fuente (Saunier Duval) marcharon escapados cerca de 120 kilómetros, siendo cazados por el pelotón a falta de 30 para la meta. En el transcurso de la carrera el trío llegó a tener una ventaja cercana a los cuatro minutos.

La tercera etapa de la ronda española entre Viveiro y Luarca, de 153 kilómetros, tuvo el protagonismo de los tres corredores citados, que se marcharon apenas abandonada la villa medieval de Viveiro, a cuatro kilómetros de la salida. El trío español hizo la transición de Galicia a Asturias en un sube y baja constante por los puertos lucenses, entre curvas y un molesto viento de cara que ponía plomo a sus pedales.

Por el alto de montaña de San André de Boimente, de segunda categoría, Vallejo pasó en segunda posición tras Martínez Acevedo. El de Mijares cruzaría en tercer lugar por el puerto Cruz da Campa de tercera categoría, lugar donde los escapados tenían una ventaja de 3:37. Sería en el Alto de Cadeira, de tercera categoría, cuando Ángel Vallejo coronase primero la cima. Entonces el trío de cabeza llegó a alcanzar 3:50 de ventaja sobre el pelotón, siendo la máxima diferencia conseguida.

Al paso por el sprint intermedio de Trabada, el abulense hizo segundo, después de David de la Fuente. Vallejo pasaría en primer lugar por la pancarta del sprint intermedio de Anleo. La diferencia de los fugados con sus perseguidores era de 3:20. En el Alto de Babia, de tercera categoría, Vallejo sería el primero, habiéndose reducido la ventaja respecto al pelotón a tan sólo 35 segundos, anulándose poco después la escapada gracias al trabajo realizado por los hombres del Euskaltel de Samuel Sánchez.

En un reducido sprint, el campeón olímpico y mundial, Paolo Bettini, aplicando táctica, astucia y fuerza, se anotó la victoria por delante de Óscar Freire, que logró mantener el jersey oro en víspera de la etapa de los Lagos. En el mismo grupo que Bettini llegaría Carlos Sastre (CSC) en el puesto 44º y Jesús Hernández (Relax Gam) en el 55º. Más retrasado y cediendo 1’24” entraría su compañero de equipo y protagonista del día, Ángel Vallejo, perdiendo 5’31” Nacor Burgos, en la posición 137º.

En la clasificación general, el primer abulense es Carlos Sastre, que ocupa la decimosexta plaza, con el mismo tiempo que el maillot oro, Óscar Freire, al igual que Jesús Hernández en quincuagésimo cuarto lugar. A 1’24” se halla Ángel Vallejo en el puesto 117º, y a 5’31” Nacor Burgos, que es el 147º.

Gracias a su buena actuación en la etapa de hoy, Ángel Vallejo es segundo en la general de la montaña, con 21 puntos, 14 menos que quien la encabeza, Serafín Martínez Acevedo. Asimismo, Vallejo es tercero en la combinada, con 141 puntos.

Mañana se disputa la cuarta etapa de la Vuelta Ciclista a España, que partirá de Langreo y coronará los Lagos de Covadonga, tras 185,1 kilómetros. La recuperación de la mítica cima en la presente edición proporcionará el primer contacto serio con la montaña y podrá marcar las primeras diferencias entre los favoritos al triunfo final.

Carlos Sastre: “En los Lagos espero ataques por todos los lados”

El ciclista abulense Carlos Sastre (CSC) apuntó que la tercera etapa de hoy de la Vuelta Ciclista a España fue "un primer test para organizar un poco la carrera" de cara a la llegada mañana a los Lagos de Covadonga, donde espera "ataques por todos los lados". "Hoy era un día importante y ha sido un primer test para empezar a organizar un poco la carrera", señaló Sastre tras la llegada a Luarca.

El de El Barraco reconoció que los Lagos llegaban "muy pronto", pero que eso era algo que ya sabían todos los corredores antes de empezar la carrera. "Los que estábamos interesados nos hemos preparado", advirtió. Además, el jefe de filas del CSC augura mañana una dura "batalla". "Espero ataques por todos los lados, y yo estaré en medio a ver qué pasa", subrayó Sastre, que cree haber "aprendido que para ganar una carrera de tres semanas como la Vuelta a España hay que tomárselo con tranquilidad".