Recién graduado como médico me planteé ir de “médico residente” a algunas de las residencias hospitalarias del antiguo SOE (Seguro Obligatorio de Sanidad). En la época, 1963, había muchas cosas obligatorias, pero la dictadura ya llevaba muchos años y la etapa de avance económico hacia crecer Vitoria fuertemente y aquí me vine pensando que poco tiempo.

La Residencia Ortiz de Zárate del Campo de Arana o Residencia Arana prestaba servicio a la Seguridad de Social de entonces. Me presenté a mi llegada a Don Pablo, el médico director, y éste me fue presentando los compañeros de la casa y las enfermeras que estaban en las plantas además de ir indicándome mi alojamiento en la habitación de primera planta número 15 que es símbolo de buena suerte.

Al llegar a quirófano el Dr. Mingo me preguntó qué especialidad tenía y yo, joven médico, dije que ginecología; entonces me dijo: si quieres haz mi labor aquí, y en efecto hice varios legrados uterinos que el veterano maestro me endosó y yo más contento que unas pascuas, por la confianza en mí.

Al día siguiente, crecido por el éxito, acompañaba al Dr. García del Busto en su visita de la mañana y el compañero mayor iba diciendo: esta señora tuvo un parto normal ayer, ésta fue una cesárea hace tres días, ésta tiene fiebre puerperal, ésta presenta un cuadro de amenaza de parto prematuro y ésta, y señaló una señora con un brazo y dos piernas enyesados y que estaba con la cadera inmovilizada, tuvo hace quince días un cigüeñazo.

Yo, aspirante a sabio, no tuve más remedio que preguntar: ¿qué es eso del cigüeñazo? y el mayor, con sorna, dijo: eso no os lo han enseñado en la Facultad. Se trata ni más ni menos de que en su pueblo se le ha caído encima, cuando iba a la iglesia, el nido de cigüeña que pesaba ocho toneladas. Le ha roto las dos piernas, un brazo y la cadera y su gestación se mantiene bravamente, como si no hubiera pasado nada.

La mujer aguantó mucho tiempo su embarazo y cuando llegó su tiempo dio a luz felizmente sin problemas, que ya era la medicina obstétrica de Vitoria de calidad, pese a no tener la tecnología actual.

Al contar la anécdota rindo homenaje a mis maestros: Mingo de Benito, José Regalado y a los colegas de la época Burgo Casas, García del Busto, Benito Pinedo y a las matronas, enfermeras y demás profesionales sanitarios y empleados de aquella Arana de 1963 tan entrañable y positiva, hoy injustamente señalada como lugar de “robo de niños”, que no existió más que en la mente “creativa”, por no decir calenturienta, de alguien que no busca la verdad sino otros intereses y que, desde luego, debería probar que tiene cierto tufo a ser una variante de histeria social sobre circunstancias y no realidades, por supuesto deseando que quede aclarado positivamente el tema.

S. Callejo

El Papa Benedicto XVI recibió en junio de 2011 a 2000 gitanos en Roma, para conmemorar el 150 aniversario del nacimiento de Ceferino Giménez Malla, “El Pele”, que es el primer Beato gitano.

“El Pele” fue fusilado por defender a un sacerdote en 1936; sus asesinos eran milicianos y ha sido beatificado por su muerte perdonando a sus matadores y por su vida ejemplar, antes, entre su pueblo.

Traemos esta pequeña noticia para condenar la Guerra del 36 y sus consecuencias y para dar un homenaje a los que como “El Pele” murieron por defender sus ideas, en los dos bandos; que en ambos hubo gente buena y mala, por supuesto, y para que su ejemplo nos sirva para amar las verdades nuestras y para que podamos respetar las de los que no piensan como nosotros.

Ya hemos escrito en la revista sobre los gitanos otras veces; alguno de nuestros colaboradores trabajó enseñando a gitanos en épocas más atrasadas, cuando se les echaba de las ciudades por la guardia civil y tenemos una valoración positiva de ellos. Son marginados sociales pero con capacidad e inteligencia e incluso con ganas de integrarse en una sociedad de progreso.

Esperamos que el Papa Benedicto XVI anime a los católicos a trabajar por el progreso, también a los gitanos y a ellos a arrimar el hombro y luchar por su dignidad y el mejoramiento de su pueblo, conservando sus cualidades positivas.-

“La flor de la guerra civil es de una trágica belleza, pero es una flor estéril”, Ibn Hazzar

“La guerra jamás es un buen sendero para la paz”, Tzun Tzu en “El Arte de la Guerra”

“Lo primero que se mata en las guerras es la verdad”, (varios periodistas americanos de valía)

“La guerra es la política con otro nombre”, Clausevitz.

He querido empezar este artículo por estas citas para culminar con dos únicas más.

“Calumnia, que algo queda”, del refranero castellano

“Di una mentira cien veces y parecerá verdad”, Goebels.

En la época en que se daba bastante credulidad a las ideas de Marx se hablaba de “Alienación”, o sea, de eliminación de la propia identidad de valores a un personaje, a muchos colectivos o a toda una sociedad, por medio de distracción, de inducción hacia actividades de disimulo social o de perversión de la ética y conducta; en palabras más cercanas al pueblo la llamaríamos “aborregamiento”, que podría llegar a embrutecimiento en ocasiones.

La alienación de las masas permite a los poderes fácticos controlarlas mejor en el beneficio de esos poderes. En realidad, estamos ante variantes de la propaganda, pero con finalidad de dominio de las mentes, individuales y sobre todo colectivas; no se trata sólo de vender cacerolas de calidad mediocre haciendo creer que son ollas de oro sino de engañar la voluntad de los pueblos para que hagan lo que el mando diga, como lo diga y cuando lo diga, esclavizando a las masas por medio de la alienación, que podríamos llamar propaganda o desinformación planificada para dominar y engañar.

Así pues en la desinformación irían incluidas muchas técnicas de periodismo, de cultura de manipulación de masas, de rumorología o de bulos que buscarían cambiar el curso de las cosas a favor de quien quiere el poder.

¿Estamos hoy en una etapa de desinformación o alienación?

  S. Callejo. 

Este club de poderosos se reunió en Saint Moritz el pasado junio de este año en un hotel de lujo.

El Club Bilderberg empezó su andadura en 1954 en Holanda, bajo la presidencia del Príncipe Bernardo en el Hotel Bilderberg y de él tomó su nombre. Grandes de la economía y la política habían tenido la idea de celebrar reuniones anuales para “intercambiar ideas”, para dar y recibir información y apuntar soluciones a los problemas del mundo y para emitir informes o consejos a gobiernos o personajes de gran influencia en ellos.

Se reúnen entre 120 y 140 personas por estricta invitación y protegidos contra intromisiones de manera discreta. Lo que se trata allí es secreto y muy poca información sale al exterior.

Daniel Estulin, escritor y autor del best seller “El Club Bilderberg”, los definió como “el gobierno secreto del mundo”; para él serían los que planificarían el Nuevo Orden mundial, los que organizan cambios de gobiernos, los que programan las guerras, dónde se hacen y cuándo van a durar. Son los socios del Bilderberg una organización de superpoder y que busca el gobierno único mundial, el dominio de la tierra y el sometimiento de la humanidad a sus designios.

Según Estulin hay una relación de colaboración, por lo menos, entre el Club, la Comisión Trilateral, La OMC (Organización Mundial de Comercio), el grupo QUAD International, la European Banking Federation y otros grandes grupos bancarios con los Rothschild y los Rockefeller entre ellos.

Este año hubo algún barullo al pretender Mario Borghezio, eurodiputado, entrar en la inauguración, pero no le dejaron los guardias, que incluso lo golpearon, al parecer.

Se les ha relacionado con la masonería por algunos de sus notables miembros y con alguna otra sociedad secreta, pero su discreción no permite afirmarlo.

Las listas de asistentes se logran por los periodistas previa vigilancia de las sedes donde se reúnen, aunque se defiende su secretismo de imagen al máximo hasta el punto de que Estulin insinuó haber sido puesto en peligro de muerte por haberse acercado demasiado a una información verdadera de lo que es este club.

Siempre hubo clanes, sociedades secretas y grupos que de manera secreta buscan el poder, pero la importancia de este club supera, con mucho, lo que ha habido antes, pues se les acusa, con o sin fundamento, de ser responsables de grandes acontecimientos mundiales, como guerras, levantamientos, atentados o asesinatos, todo ello grave y digno de estudio

En la lista de españoles invitados este año han estado la Señora Cospedal del PP y el año pasado estuvo Zapatero en la reunión que tuvo lugar en Sitges. La Reina Sofía es de las habituales, con otros representantes de casas reales y Cebrian el periodista, Solana, Botín y otros próceres que no enumero pero que salen en internet y, al parecer, van o han ido otros años.

Los invitados hablan y se les contesta a sus conferencias, Zapatero lo hizo el 2010 y al parecer de allí salió la opinión de que nuestro presidente debía ser cambiado. Naturalmente hay quien dice que ZP se buscó la ruina política él solito por su inepcia.

El Club Bilderberg es pues un club selecto de opinión y acción político-económica y social de envergadura mundial que puede condicionar nuestras vidas y futuro.

S. Callejo.